Hace muchos, muchos años, Exactamente un montón En una remota región Cayó una inmensa nevada. Y hasta aquí no pasa nada. Pero ahora viene el lío. Una reina caprichosa, Pensando en sus reales cosas, Muy distraída cosía. “ Ay, ¡Dios mío, qué avería! ¡Me he pinchado con la aguja!” Y, sin más, la reina estruja Aquella herida sangrienta. ¡ Oh qué imagen tan violenta! Pero ella no lo ve igual; Le parece colosal Aquel paisaje formado Por su sangre, lo nevado, La cúpula celestial A través del ventanal Y la noche, negra noche, Noche negra y estrellada. ¡ Oh, dios mío, qué monada! “Yo quiero una hija así: que destelle en todo el cielo, con las nubes por sombrero y un corazón luminoso. y ya no quiero más nada” Y a los nueve meses justos, Por ser deseo real, Vino a este mundo mortal Una preciosa niña. Con luz propia y muy riquiña: Blancanieves