El escritor Ricard Ruiz Garzón sufrió la desgracia de vivir el suicidio de un amigo. Sin embargo, este mal fue el motor de un libro que publicó en 2005, 'Las voces del laberinto', un libro que recoge quince relatos con los que dibuja los caminos de la esquizofrenia a través de los testimonios de enfermos y familiares.
A su vez, el texto de Ruiz Garzón es lo que le ha servido a las compañías La caja de fósforos (de Caracas) y La Máquina (de Valencia) para trabajar de nuevo conjuntamente en otro proyecto teatral, como ya hicieron con 'La Festa', en 2011. De ellos nace 'Hay que tirar las vacas por el barranco'.
El reparto lo componen cinco actores. Cada uno representa una voz diferente. Es un relato dividido en cinco testimonios, que pretenden desmontar algunos de los tópicos con los que conviven los enfermos y sus entornos. Es una obra que ahonda en el espacio de lo humano, en los miedos que compartimos con estas personas.
Así, con Diana Volpe, se inicia el camino: En 'Entrando en el laberinto', una madre habla del suicidio de su hijo. Después, con Gretel Stuyck, Haydée Faverola y Rafa Cruz, llegamos a la parte 'Recorriendo el laberinto', en la que descubrimos los estragos que causa la esquizofrenia en los pacientes. Finalmente, Ricardo Northier actúa en 'Saliendo del laberinto', que puede pasar por la cura o por el suicidio. Todo, bajo la batuta de uno de los directores de teatro más prestigiosos de Venezuela: Orlando Arocha.
Funciones en el Teatro Español
'Hay que tirar las vacas por el barranco' se estrenó el 14 de junio en Valencia en el Centro de Teatro La Máquina. Y se representa en Madrid, en la Sala Margarita Xirgu del Teatro Real entre el 20 y el 23 de junio de 2019.